ROSSINI TRIUNFANTE EN EL MUNICIPAL.

LA FIESTA CONTINUA DEL TURCO EN ITALIA.

La versión Estelar del Turco en Italia, la ópera de Gioacchino Rossini, volvió a cautivar a los asistentes, tanto como a aquellos que asistieron a la función del elenco Internacional.

Es que las bondades analizadas de la otra versión, continúan destacándose, con este elenco Estelar, que reúne en su mayoría a cantantes chilenos, incluso algunos de ellos, emergentes; no cabe duda que sus condiciones naturales, sumadas a la escrupulosa règie de Emilio Sagi, volvió a crear un espectáculo fascinante, que no deja a nadie indiferente, el otro factor, es que la misma batuta, la de José Miguel Pérez-Sierra, dirige ambos elencos, consiguiéndose entonces, gran unidad de estilo y enfoque.

En cuanto a su dirección, en el elenco Estelar, no se produjo ahora desajuste alguno, en el último septeto, en cambio, se apreciaron en ciertos momentos algunos sonidos poco pulcros, pero salvo eso, en el resto la orquesta volvió a mostrar estupendo sonido, y Pérez-Sierra, se adaptó perfectamente a las potencialidades de los cantantes, convirtiendo nuevamente a la orquesta en cómplice musical de este elenco.

Del mayor interés, es que este reparto, fuera dirigido por Sagi, respetando sus propias características personales, pero sin perder la esencia de su planteamiento; a manera de ejemplo, en el rol de Geronio, se aprovecha la facilidad de comediante de Sergio Gallardo, tanto como la graciosa sensualidad que Patricia Cifuentes, le puede otorgar a su personaje, esto por solo señalar a dos de los personajes.

Creemos asimismo, que en una segunda oportunidad, se aprecia mejor, el continuo que logra la règie de Sagi, pues a lo largo de toda la ópera, nada se interpone, o menoscaba a los cantantes principales, sobre todo considerando que siempre está fluyendo la vida en este rincón de Nápoles, donde se desarrolla la trama, tanto en la Pizzería Vulcano,  como en las dos calles, y en los departamentos de los edificios de esas calles; sin duda una demostración magnífica de lo que es una excelente règie.

El elenco fue encabezado por Ricardo Seguel, que derrochó abundantemente, toda su  potencialidad vocal, que cuenta con una gran tesitura, y como se trata de un gran actor, recreó perfectamente y en propiedad a Selim, el turco, que llega a buscar una esposa a Italia, pero que, al final desilusionado, vuelve a los brazos de Zaida, su antigua y desechada amante. Divertidísimo fue su dúo con Don Geronio, sobre las costumbres turcas e italianas.

Fiorilla, la casquivana esposa de Don Geronio, fue interpretada por Patricia Cifuentes, que a su canto estupendo, solo con algún pequeño contratiempo en alguna coloratura del comienzo, el que no logró empañar en nada su magnífica performance, porque una vez superado el albur, se adueñó del escenario, asombrando con la solvencia que se le reconoce, además como actriz, fue coqueta, sensual, irascible, tanto como perpleja al darse cuenta, que puede perder todo, marido incluido, para finalmente manifestarse arrepentida y amorosa; su aria final fue del más alto nivel, mostrando la enorme capacidad de la que es dueña.

Sergio Gallardo fue Don Geronio, quien aprovechando su gran capacidad para convertirse realmente en sus personajes, creó ahora, un muy divertido esposo atormentado por las infidelidades de Fiorilla, su esposa; vocalmente en excelente estado, sin problemas en trabalenguas, es siempre garantía de profesionalismo; los diversos estados emocionales por los que pasa, casi terminan conmoviendo.

Patricio Sabaté, es otro de los cantantes que nunca defrauda, no solo aprovecha su hermoso material vocal, que aquí luce ampliamente, también es imbatible como actor, con una gesticulación a la que agrega hábilmente movimientos corporales, crea un convincente Poeta; muy divertido fue la escena en que trata de colocar una silla a Zaida, que no cesa de moverse, mientras él usa una bota ortopédica.

Santiago Bürgi, el tenor argentino, fue Don Narciso, otro enamorado de Fiorilla, tuvo momentos brillantes, como el increíble agudo de su aria, que hizo delirar al publico, pero como actor, al parecer, la comedia, no le acomoda perfectamente, no obstante logró dominar muy bien su personaje.

Yaritza Véliz, que asumió como Zaida, mostrando una poderosa y muy bella voz, con una bella línea de canto, pero creemos que debe cuidar ciertos pasajes, donde tiende a calar levemente, porque sin duda, tiene un gran futuro, ya que es una estupenda actriz.

Una muy grata sorpresa fue el joven tenor Diego Godoy-Gutiérrez, tiene un hermoso material vocal, es musical, además de poseer facilidad en los agudos, cuando adquiera más confianza en sí mismo, su canto y actuación serán mucho más naturales, pensamos que tiene un gran futuro, porque su Albazar, fue tremendamente aplaudido por el público.

Un función del Turco en Italia, que encantó y divirtió enormemente al público, tal vez casi tanto como a Rossini al escribirla; y no podemos sino reiterar, que se trató de uno de los mejores espectáculos vistos en el Municipal.

Gilberto Ponce. (CCA)