NAVIDAD 2010 EN LA UNIVERSIDAD CATÓLICA.
En el Salón Fresno del Centro de Extensión, se realizó el tradicional Concierto de Navidad que ofrecen los conjuntos de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Participaron la Orquesta de Cámara de la UC, que dirige David Núñez, los Coros de Cámara y de Estudiantes UC dirigidos por Mauricio Cortés y Víctor Alarcón respectivamente, además de cuatro solistas vocales, enfrentando un atrayente programa, en base a selecciones de la “Serenata N° 7 en Re mayor K.V. 250 llamada Haffner” de Wolfgang Amadeus Mozart y la hermosa “Misa en Do mayor, Op. 86” de Ludwig van Beethoven cuya dirección general estuvo a cargo del maestro Jaime Donoso.
Los resultados, distaron bastante de la habitual calidad de sus intérpretes, de quienes hemos escuchado conciertos memorables. Por ello creemos que con una mayor cantidad de ensayos, su resultado cambiará radicalmente.
La Orquesta, se presentó con una cantidad mínima de violines, que no pudieron hacer
contrapeso, a maderas, bronces y percusión, los tres movimientos de la Serenata Haffner que dirigió David Núñez, acusaron tempos y pulso poco claros, ataques sucios, al parecer, debido a la poca comprensión de los gestos del director, el sonido estuvo alejado de la elegancia propia del estilo, y las maderas y bronces predominaron en exceso.
En general, los jóvenes estudiantes que integran el conjunto, se vieron tensos y poco seguros, sin duda el período final con exámenes de por medio incidió en el resultado, aún recordamos su memorable presentación con Orfeo de Monteverdi.
La segunda parte contempló la “Misa en Do” de Beethoven, donde la orquesta presentó los mismos problemas, agravado, por el sonido a veces demasiado forte de bronces y el timbal, sus fraseos no fueron siempre claros; la musicalidad propia de los jóvenes instrumentistas, surgió a momentos. En este sentido debemos reconocer el trabajo de David Núñez desde el primer atril, al ajustar algunos problemas de pulso.
Sin duda que cuando conozcan el sentido
general de la obra y tengan la cantidad de ensayos suficientes, ganarán en seguridad e interpretación.
Los coros observaron mayor seguridad, pero el concepto de Jaime Donoso parece no ser cabalmente comprendido, con varios momentos confusos en el pulso, en los frecuentes cambios de tempo.
Sopranos y contraltos mostraron un mejor desarrollo vocal y musicalidad, mientras que tenores y bajos se apreció solo su musicalidad, puesto que en lo vocal, fueron superados por la tesitura, a manera de ejemplo, las notas graves de los bajos, se intuyeron y las agudas de los tenores estuvieron al límite.
Los solistas fueron encabezados por la soprano Andrea
Aguilar, ella cantó con bella voz y musicalidad, su perfecta afinación, sufrió en una pequeña parte del Benedictus, debido a la afinación dudosa entre el órgano y maderas, Pilar Díaz la contralto, mostró su hermoso timbre, derrochando musicalidad, incluso en su “miserere” del Gloria, cuando los pulsos orquestales fueron en extremo dudosos. Francisco Espinoza el tenor, una grata sorpresa, de gran musicalidad -y creemos además intuición-, mostró un bello y fácil timbre, agregando mucha seguridad.
El poderoso caudal vocal que posee el bajo Eduardo Jahnke, debió cuidarlo al máximo, para no sobresalir, y quedar fuera de estilo, por ello su actuación la calificaremos de formalmente correcta.
El Benedictus, donde el cuarteto es más exigido, fue uno de los momentos altos de la versión, reconocemos además, la participación en esta parte del flautista Jesús Solís por su gran musicalidad.
Creemos que la sabiduría y musicalidad de Jaime Donoso, no se mostró debidamente, se preocupó demasiado del coro, descuidando balances e inflexiones en la orquesta, como así mismo de un mejor manejo de los contrates.
Cuando la obra madure, sin duda se convertirá en un gran éxito.
Gilberto Ponce. (CCA)
Si le pareció tan destacable la participación del flautista en el Benedictus, por qué no nombrarlo?…su nombre es Jesús Solís Morales…y es un excelente músico.
Me parece importante destacar a las personas con nombre y apellido, gracias por su atención.
Liliana, el nombre del flautista no se puso, debido a que en el programa no aparecía, ahora qué quien es editaré la crítica y lo pondré.
Muchas gracias.
Gilberto Ponce.