MUSICA ANGELICA BAROQUE ORCHESTRA.

BELLO, PERO DISTANTE.

Música Angélica Baroque Orchestra. foto Bach-cantatas.com

La presentación en el Teatro Municipal de la “Música Angélica Baroque Orchestra”, conjunto estadounidense con sede en California, dejó sensaciones encontradas y gusto a poco. Afirmamos esto debido a la exquisitez  de su enfoque musical, que de tan abundante, se transforma en algo muy hermoso, pero distante, debido tal vez a una buscada e inexpresiva intencionalidad, que según algunos responde al estilo.

“Música Angélica Baroque Orchestra” fue fundada en 1993 con el propósito de difundir la música barroca con instrumentos de época, entre sus propósitos está, “el interpretarla en forma auténtica”, lo que puede resultar un tanto arrogante, por la no resuelta discusión en torno a la interpretación barroca, no obstante rescatamos la intención de acercarse a la autenticidad. Aunque a la postre, su sonido es semejante al de muchos otros conjuntos dedicados a esta música.

Martin Haselböck su director, no vino en esta oportunidad, en su reemplazo el concertino Ilia Korol, asumió con mucha destreza la dirección desde su violín, al grupo formado por 13 cuerdas, tiorba y guitarra barroca (tocadas por un mismo intérprete), y dos solistas en flauta travesera barroca y oboe.

Ilia Korol. foto lasplash.com

Dos obras de Johann Sebastian Bach se interpretaron en la primera parte, primero la “Suite en Si menor. BWW 1067 para flauta y orquesta«, con un flemático Stephen Schultz como solista, la versión se sumerge tal vez, en el ambiente refinado y elegante de la corte de Sans Souci, por el recargado tipo de ornamentación, reflejo del esplendor del palacio de Federico el Grande.

Stephen Schultz. foto congioia.org

Esta se caracterizó por la liviandad sonora, precisos arcos y ornamentaciones, replicado incluso en el sonido de la flauta que fundió su sonido con el resto de la orquesta, el “Rondeau” sobresalió por el concepto dinámico, la “Sarabanda” por la oposición grupo grande- pequeño, el “Bourré” por el hermoso diálogo de la flauta con dos violines solistas, diferente a lo tradicional fue la “Polonesa” con sus sonidos cortos, aunque el triunfo mayor fue la popular “Badinerie”, por el virtuosismo del solista y su relevancia sonora, además de sus geniales diálogos con la orquesta.

Pensamos que el mayor logro de la noche fue el “Concierto para Oboe, violín y cuerdas en Re menor BWW 1060” con Gonzalo Ruiz como un estupendo y musical oboísta, estas características llevaron a una excepcional respuesta del grupo, que hizo gala de notas “soufflé”, con la elegancia propia de la más fina porcelana.

Gonzalo Ruiz. foto voiceofmusic.org

El hermoso y expresivo sonido de Ruiz fue fundamental en el éxito total de la obra. Su segundo movimiento fue de extraordinaria belleza por la atmósfera creada por las cuerdas, al sustentar el diálogo entre oboe y violín, el complemento vino con la vitalidad, contrastes y virtuosismo del solista en el tercero.

El preciosismo de los intérpretes llegó al máximo con “Las cuatro Estaciones” de Antonio Vivaldi, Ilia Korol en su rol de solista, extremó la dinámica “pianísimo” desapareciendo su sonido en muchos momentos con las melodías de chelos y contrabajo.

Ilia Korol. foto ensemble-moderntimes.com

En contraste, cuando fue exigido en virtuosismo, su performance fue del mejor nivel.

En el “continuo” participó Daniel Zuloaga tocando guitarra barroca, con gran musicalidad siempre presente, en la misma línea fue el desempeño de los fragmentos en trío de violines, o la musicalidad de las violas en la segunda parte de “la Primavera”.

En el “Verano” destacaron las progresiones dinámicas, tanto como el exigente final. En el “Otoño” llamaron la atención algunas libertades de ritmo, destacándose la atmósfera creada por la guitarra a través de musicales arpegios en el segundo movimiento.

El “Invierno” destacaremos la progresión dinámica del inicio, el pulso poco claro en la sección central, y el virtuosismo del final.

Versión exquisita, pero a nuestro juicio carente del espíritu cantábile italiano, sin duda un conjunto es la búsqueda del sonido barroco, pero aún inexpresivo, que es lo contrario a lo que fue el período.

Gilberto Ponce. (CCA)

0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar de
guest

0 Comments
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios

Últimas Críticas

0
Me encantaría tu opinión, por favor comentax