PREMIO NACIONAL DE MÚSICA.
Una de las mejores noticias del último tiempo en el ámbito de la Música, se produjo hoy cuando en la mañana se anunció que el Premio Nacional de Música había recaído en Miryam Singer.
Noticia que provocó una alegría transversal, porque ella se ha ganado, en el ambiente artístico de nuestro país, así como en el extranjero un sólido y merecido prestigio.
Su espíritu incansable, que busca la excelencia, aunque a veces cuente con escasos recursos, le ha granjeado incontables seguidores de sus producciones, en las que siempre ha mezclado a profesionales de renombre con alumnos aventajados, con lo que cierra el círculo pedagógico que inicia con sus clases de ópera en el instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Miryam es generosa como docente, por ello consigue que sus alumnos alcancen metas de gran profesionalismo, sabe captar las condiciones de cada uno en particular, para hacerlo crecer como artistas.
Estamos en este caso, ante una artista como las que existían en el Renacimiento, de múltiples talentos, los que explota, buscando siempre renovarse, y no sólo en la ópera, también en las más variadas puestas en escena, muchas de ella marcando tendencias, cómo olvidar su “Mil voces den la UC” que congregó a todos los numerosos grupos corales de esa universidad, como asimismo sus trabajos en el Salón Fresno del Centro de Extensión UC; como Pierrot Lunaire, La Historia del Soldado entre muchas otras que causaron enorme impacto.
El estreno en ese lugar de la ópera Orfeo de Claudio Monteverdi, con dos funciones repletas de público, y con muchos quedando fuera, fue un evento. Compartí en esa oportunidad con una profesora del Departamento de Música de la Universidad de Chicago, que había visto muchas producciones tanto en USA como en Europa, y esta simplemente la sobrecogió, y todo en un lugar que no reúne las mejores condiciones.
En el mismo lugar, la genialidad de sus producciones de El rapto en el Serrallo y Cosi fan tutte ambas de Mozart en las que con elencos de alumnos aventajados logró espléndidos resultados.
El Teatro Municipal de Las Condes, tuvo el privilegio de contar con sus producciones durante varios años, con localidades agotadas para todas la funciones, doce fueron las de su última Carmen, donde mezcló sabiamente lo tradicional con la tecnología.
Su Flauta Mágica en el Teatro Municipal de Santiago, fue un mundo de desatada magia.
Podríamos continuar señalando muchos de sus trabajos, los que sin duda contribuyeron a que el jurado decidiera entregar el Premio Nacional de Música 2020 a Miryam Singer.
Gilberto Ponce.
Círculo de Críticos de Arte de Chile.
Muy merecido premio para Myriam Singer.he visto muchas de sus puestas en escena,la que más me ha impactado fue Der Kaiser von Atlantis de Viktor Ullmann en el Salón Fresno de la U C,y muchas otras como Carmen Madama Butterfly,y también La Flauta Mágica.Con pocos recursos o con muchos hace maravillas.Me gustaría que el Teatro Municipal la invitará a menudo cuando vuelva la normalidad.Felicitaciones para ella.