GRANDES PIANISTAS JOVENES.

ZENTENO Y ESPEJO DOS PIANISTAS EN ASCENSO.

Tal como en las antiguas tertulias musicales, José Pedro Zenteno y Claudio Espejo, dos jóvenes  pianistas chilenos, actualmente perfeccionándose en la famosa “Eastman School of Music”, Rochester NY. con la reconocida profesora Rebecca Penneys, ofrecieron en medio de sus vacaciones, un recital privado, que tuvimos la oportunidad de presenciar.

José Pedro Zenteno y Claudio Espejo. foto interpretes

Antes les habíamos escuchado en sus primeras presentaciones, en su temprana y talentosa  adolescencia, ahora, y con menos de veinte años, es reconfortante comprobar sus notables avances, como el incremento de una sólida técnica, aplomo interpretativo, y sobre todo, derrochando musicalidad.

La presentación, una repetición de las realizadas en la Sala Claudio Arrau del Teatro Municipal y en la Galería Patricia Ready, en ella tocaron en solitario y a cuatro manos, provocando grandes muestras de admiración de parte de los presentes.

Un aspecto muy llamativo, fue la variedad y exigencia del repertorio, obligándoles a transitar por los más diferentes estilos, que enfrentaron estupendamente, indicativo de la madurez alcanzada.

Perfectamente afiatados, se les vio en las dos obras a cuatro manos, primero en las dos partes de la sutil y descriptiva “Petite Suite” de Claude Debussy, que abrió el recital, el resto, les sirvió como una de las obras de cierre; la otra fue una de las “Cuatro Estaciones Porteñas” de Astor Piazzolla, sorprendiendo su sentido expresivo, aunque a este le falta algo de la sensualidad del “arrabal”, que sin duda lograrán, cuando la vida les haya mostrado más sus rigores y sinsabores.

José Pedro Zenteno en clases con una maestra rusa en USA. foto intérpretes

 José Pedro Zenteno, inició su parte a solo con una elegante y expresiva versión de la Sonata en Fa menor de Domenico Scarlatti, en la que no elude las alusiones a lo español, tan presente en muchas obras del compositor.

Frederic Chopin joven. foto wikipedia

Siguió con el Nocturno en Mi bemol mayor, Op. 55 Nº 2, de Frederic Chopin, en una versión bastante contenida, que afortunadamente  se contrastó en la sección central, que fue evidentemente lo más logrado, para luego concluir finamente el arco expresivo, con la sutileza del final.

Palabras mayores, significa enfrentar una de las obras más importantes de Franz Liszt, nos referimos a su “Sonata Dante”, que tal como lo plantea su autor, es una Fantasía-Sonata, producto del impacto que le produjo la lectura de la Divina Comedia de Dante.

Su único movimiento plantea muchos desafíos;

Franz Liszt joven. foto vidasyobras

primero los relativos a la técnica –no en vano se la considera una de las obras más difíciles para el piano-, también lo es en cuanto a diferenciar, las descripciones que realiza Liszt de algunas de los cantos de la obra, que son tan diferentes como próximos entre si; este, además del técnico, es uno de los mayores logros de Zenteno, que con inteligente uso de la fuerza, contrastado con los momentos líricos, le imprimió carácter trascendente, concretando coherentemente el relato que la obra posee.

 

 

Claudio Espejo, tocó en primer lugar la “Sonata Nº 2 en Si bemol menor, Op. 35” de Frederic Chopin, donde sus notables avances técnicos quedaron en evidencia; en el primer movimiento mostró hermoso “canto” en los temas, y contenida pasión; exultante y poderoso fue el Scherzo que sigue, en el existe un fuerte contraste en su lírica sección central, allí volvió a aflorar el sentido melódico de Espejo.

Claudio Espejo. foto intérpretes

El obsesivo tempo de la celebérrima “Marcha fúnebre”, fue muy bien dosificado,  exponiendo así la ambivalencia de los sentimientos expuestos, tal vez, fue un poco rápida la melancólica sección central, para luego concluir en el desolado y expresivo final.

Sorprendente por su gran claridad melódica, fue el virtuosístico y vertiginoso  movimiento final, algo extremadamente valioso en un intérprete tan joven.

Las excelencias continuaron con su versión de dos partes de “Petroushka” de Igor Stravinsky, exhibiendo todo el virtuosismo del que puede dar cuenta; gran manejo de los contrastes dinámicos y de carácter, mostrando todos sus elementos descriptivos; ambos fragmentos, se desarrollaron con algún esporádico accidente, a pesar de las descomunales dificultades que contiene.

Un recital, que habla muy bien de los sólidos pasos que estos dos jóvenes, están dando en el complejo mundo del piano, José Pedro Zenteno y Claudio Espejo.

Gilberto Ponce. (CCA)

0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar de
guest

0 Comments
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios

Últimas Críticas

0
Me encantaría tu opinión, por favor comentax